la vida es un ratico

Saltó del tren al abrirse la puerta
La silueta de sus tenis quedaron marcadas en la arena
Ahora aquel viajero errante se encontraba en posición neutral.
Miro su reloj
Y de un tirón lo sintonizo con el mundo.
Entonces,
En ese instante la tierra escupió el sol desde sus entrañas hasta el cielo
El viajero, empezó a andar
(A la misma velocidad en que el sol llegaba a la mitad del cielo)
La tierra empezó a rodar
Las olas empezaron a bailar
El reloj empezó a andar
El mundo empezó a moverse.

Se encontraba en una parada para visitantes en aquella vieja estación,
Algo sencilla pero acogedora,
El viajero se entretuvo un rato con los diferentes y raros objetos que adornaban aquel lugar,
Después de un rato salió por la parte trasera de la tienda,
la cual daba cara a un mar juguetón,
el viajero se enamoro del vaivén de sus olas,
pidió un mocacchino
y se dirigió hacia el mar,
sus tenis dejaban su marca tras cada paso dado.

Se sentó en la orilla,
miró el mar,
cuzó los pies,
sonrió,
miró el mar nuevamente,
se llevó el moca a la boca,
y volvió a sonreír.
Se quedó absorto observando los movimientos que el mar le mostraba

El sol estaba más allá de la mitad de la mitad
Ya casi, casi ocurriría,…
el viajero tomo el vaso de moca ya vacío< br> Descruzo las piernas, sonrió,
Miro el mar nuevamente
Se puso de pie y se dio la vuelta,
se dirigió a la tienda,

Miro el reloj,
ya el ultimo tren se acercaba,
y también casi, casi…,
el estaba un poco nervioso y ansioso
se escucho un silbido.
El tren llego,
todos entraban despacio y en fila,
el viajero era el último
el volvió a mirar su reloj
y se dio cuenta de que ya faltaba poco.

Por fin ya llego su turno de subir,
se agarro del mango de la puerta
puso el pie izquierdo en el primer peldaño del tren
miro el mar, ahora con miedo
subió el otro pie, el tren encendió
y en ese mismo instante la tierra se trago al sol
y desde sus entrañas escupió la luna.